PEQUEÑOS PLACERES



…una puerta que se abre…

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… dos personas que se enamoran…

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… pasear junto al mar…

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…que tu sillón favorito te espere al volver casa…

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…pintar…

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…el olor de tus flores favoritas…

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…una buena conversación en un bonito lugar…

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…un beso a escondidas…

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La felicidad en pequeñas dosis a menudo se encuentra en las cosas cotidianas pero también todos tenemos GUILTY PLEASURES, sí… Son esos pequeños placeres, a veces culpables, que nos da vergüenza reconocer pero que están ahí.

…comerte un súper helado y hasta al heladero si hace falta mientras «moqueas» viendo la misma peli romántica una y otra vez en los días depres…

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…¡las congas! Un imán para mí, es algo incontrolable siempre acabo iniciando alguna…

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…tirarte en plancha en la cama a hacer la estrella de mar justo cuando está recién hecha…

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…ser una adicta a las pelis de James Bond…

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…venirse arriba con las canciones de Camilo Sexto ( oh….sí…»mola mazo» jeje)

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… Andar siempre en pelotilla por casa , no importa la época del año, y taparte de la forma más absurda con cualquier objeto si de pronto descubres que te has vuelto a dejar el balcón abierto…

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…no necesito películas de terror, sólo ponme un documental de animales de la 2  (lo de la cadena alimenticia lo llevo francamente mal)…

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…cocinar mientras tomas una copa de vino y acabar seriamente perjudicada…

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Tengo muchos pero que muchos más «guilty pleasures» pero creo que por hoy es más que suficiente o mi reputación se verá seriamente perjudicada.
Y vosotros, no vayáis a dejarme sola…¿cuáles son vuestros placeres culpables?

 

43 comentarios

    • Ayyyy nooooo, no serán pellizcos jeje
      Tengo una tía que tenía por costumbre hacer eso. Recuerdo que de pequeñajos los primos nos dábamos empujones por no ser el primero o la primera a la que saludaba porque a ese….ay pobre! Lo cogía con ganas…
      Ahora la entiendo porque es verdad que están blanditos.
      Un abrazo

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  1. Los míos no son mucho más especiales. .. Además de todos los expuestos, Me apasionan las cosas sencillas y naturales, como el olor a pan recién horneado, a hierba recién cortada, a tierra mojada antes de llover, mirar una noche estrellada, ver llover o nevar desde la ventana, mientras escucho el chisporrotear de la leña en la chimenea.
    Enamorarme. Enamorarme de alguien especial, buscarla cada noche en la luna a una hora determinada, hablar profundamente de temas que nos gusten a los dos, escuchar su voz y observar su sonrisa mientras me habla, sentirla, como siento el frio o el calor.
    Pasear de su mano, protegerla de sus miedos, hacerla sentir amada y amarla desde el silencio y en la distancia si no estoy con ella. Compartir sus alegrías y sus penas, sentarnos juntos y contemplar un amanecer, tocarle y cantarle canciones con mi guitarra, hacerla sentir su libertad y grandeza de mujer. Escribirla poemas y escritos que ni yo sé de donde salen, contarnos nuestras experiencias, opinar sobre el último libro que hemos leído y contarle de forma cómplice todas estas pequeñas cosas que me gustan de la vida, haciendo que las sienta de forma tan intensa que jamás pueda olvidar y nunca hacerla esperar. Sentir penetrar en mi pelo sus dedos, sus cuidadas uñas que me acarician lentamente y me despeinan. Apoyar mi cabeza en su pecho y escuchar los latidos de su corazón. Mirarla profundamente a los ojos para poder ver su Alma, su transparencia, donde el silencio habla y donde todo lo demás desaparece. Gracias por hacerme evocar tan simples y valiosos placeres, que nada tienen de culpables y que más bien, forman parte de la vida misma. Tranquila, nunca te dejaremos sola, salvo que eso sea lo que quieres. Ciertamente me conformo con todo esto, que puede parecer poco, y sin embargo es demasiado para mí.

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  2. Sumergirme en el agua de la playa hasta la altura de mis glorias y darle un gusto al cuerpo junto a un compañero tras una larga, cansada y gratificante jornada laboral, mientas el sol se refleja en las aguas y la felicidad nos inunda. En lengua vulgar: una lluvia dorada mientras cantamos habaneras.

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  3. Bailar como una posesa en pelotas delante del espejo, asustar al gato, cantar a voces, bailar bajo la lluvia… Y muchos, casi todos, de los que ya has dicho

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  4. Uy, pues yo soy muy básico, Entre mis placeres culpables están hacer pis en la ducha (al mismo tiempo que me ducho, claro) y cantar e interpretar canciones en la soledad de mi coche, cuando creo que nadie me ve….

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  5. Un pequeño placer confesable es hundir la cuchara en el pote de dulce y no abandonarlo hasta ver su final. Otro placer, grande y sin culpa:

    Desde En Humor Arte te he nominado para los premios Wonderful Team Member Readership Award y Versatile Blogger Award.

    Gracias por enriquecer la (y mi) blogósfera. Y los links son (cha chán cha chán) http://veronicaboletta.wordpress.com/2014/05/28/preseas/ http://veronicaboletta.wordpress.com/2014/05/28/preseas-i/

    Mis felicitaciones y saludos

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  6. Esas pequeñas cosas son las que hacen la vida mas hermosa…no es tanto lo material porque al final nada nos llevamos…que linda entrada, feliz día, recibe un abrazo

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  7. Pues me sumo a todas y cada una de ellas. Particularmente sumaría algún detalle, como conversar, también mientras se cocina (sí, cocinar de a dos también tiene su costado romántico) mientras con el índice le das de probar al otro lo que estás preparando y luego terminas probando ése mismo dedo tú mismo… Que te despierten con un beso en el nacimiento del cuello, estar en silencio, bebiendo una taza de té mientras se mira por la ventana… soñar con Nueva Zelanda… tantas cosas que pueden hacerse por casi nada….
    Cariños.

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